Galcerán de Pinós

Galcerán de Pinós

La Baronía fue una jurisdicción señorial que desde el siglo XI perteneció al linaje de la Casa de Galcerán de Pinós, ubicada en el Condado de Cerdaña, concretamente en el pagus de Berga.

El territorio limitaba al norte con la Sierra del Cadí, al sur con la riera de Malanyeu. Al este limitaba con la baronía de Mataplana en Gavarrós y al oeste con la Sierra del Verde y el Pedraforca incluyendo términos de Gósol, Saldes, Feners y Espà. Fuera de estos límites básicos, los señores de Pinós, también poseían Banat y Vilanova de Banat (o Calbell de Banat), el Querforadat y Ansovell, términos situados al norte de la Sierra del Cadí, así como las poblaciones de Pinós y Vallmanya y al Alta Segarra.

Galcerán de Pinós

El primer Galcerán (Garcerán) de Pinós fue Mir Riculf (…-1068), uno de los legendarios nueve barones de la fama, también conocidos como Los Nueve Caballeros de la Tierra, barones de la tierra catalana, con el afán de reconquistar los territorios ocupados por los sarracenos. Su hijo, Galcerán de Pinós (1068-1117) trasladó su sede al castillo de Bagà.

Los barones construyeron el castillo de Bagà, ya en el siglo XIII, y el año 1233 fundaron la villa de Bagà. Galcerán de Pinós y su mujer Esclarmonda concedieron una carta de franquicias que favoreció el poblamiento de la villa.

Palacio de Pinós
Palacio de Pinós

Es posible que el Castillo de Pinós hubiera pertenecido originalmente a la Baronía de Lluçà, que fue el primer gran feudo de su zona. El Castillo Merlés ≈ Castell de Merlès perteneció inicialmente a la Baronía de Lluçà, y actualmente las ruinas del Castillo de Pinós se encuentran en el municipio de Merlés.

No obstante, el Castillo de Merlés no se menciona vinculado al patrimonio de los Barones de Pinós, constando que Don Galcerán Mirón ≈ Galceran Miró de Pinós, Príncipe de Berga-Pinós /…-1117/ ≈ Galceran I, Barón de Pinós /1068-1117/, hizo acta sacramental reconociendo su vasallaje a Don Guillermo Raimundo de Cerdaña ≈ Guillem Ramon de Cerdanya ≈ Wilchelm Raginmund, Anaque de Catalania-Barcelona-Cerdaña /…-1095/ ≈ Guillem I, Arconte de Cerdaña /1068-1095/, y a Don Don Bernardo Guillén de Cerdaña ≈ Bernat Guillem de Cerdanya ≈ Berinchard Wilchelm, Anaque de Catalania-Barcelona-Cerdaña /…-1117/ ≈ Berinchard I, Arconte de Cerdaña /1095-1117/, por los castillos de Pinós, de l’Espà, de Gòsol, de Saldes, de Quer-foradat, y de Valmaña ← Vallis Magna → Vallmanya.

Entre sus descendientes destacan:

1 -Garcerán II de Pinós
Liberación de Galcerán de Pinós
Liberación de Galcerán de Pinós

Galcerán II de Pinós, protagonista del relato que contaba la historia del noble prodigiosamente liberado de la prisión sarracena por intervención de San Esteban sin haber tenido que entregar el costoso rescate exigido por el rey de Almería y Granada, que incluía cien doncellas de la baronía de Pinós.

 La leyenda de Galcerán de Pinós y el rescate de las cien doncellas o de Sant Esteve

El año 1147 Ramon Berenguer IV, conde de Barcelona, envía una armada para ayudar Alfonso de Castilla, los genoveses y los pisans a conquistar Almería. Como almirante de la armada participa Galcerán de Pinós, hijo y heredero de los barones de Bagà. 

Se consigue conquistar la ciudad, pero Galcerán y un compañero suyo, Santcerní, son hechos prisioneros y trasladados a la prisión de Granada. El padre de Galcerán pide ayuda al conde Ramon Berenguer para saber si su hijo es vive o muerto y si piden rescate para liberarlo. Los sarracenos informan que vive y hacen saber el contenido del rescate: ciento mil dobles de oro, ciento trapos de brocado de oro, ciento caballos blancos, ciento vacas bragadas y ciento doncellas. Los barones de Pinós aportan su patrimonio y consiguen reunir el rescate, excepto las ciento doncellas.

En una asamblea con los vasallos, estos deciden dar sus hijas de la siguiente manera: quién tenga tres dará dos; quién dos, una; y los que tengan una entrarían en un sorteo por saber la escogida. Una vez recogida todo el rescate se hace una comitiva que se dirige al puerto de Salou para zarpar hacia tierras sarracenas.

Mientras tanto Galcerán ruega fervientemente a san Esteve, patrón de Bagà, para qoe lo libere de su cautiverio. Y el día antes de que el rescate se embarcara, san Esteve se aparece a Galcerán y lo libera; igualmente pasa con Santcerní que también es liberado por la intercesión de Sant Genís, patrón de su parroquia. La comitiva del rescate y los dos liberados milagrosamente se encuentran al camino del Rincón (Vila-seca) muy cerca del puerto de Salou. Con gran gozo se reconocen y van juntos hacia Tarragona y de allí a Barcelona para presentarse ante Ramon Berenguer IV. Una vez reposados, devuelven hacia Bagà dónde son recibidos con inmensa alegría. Galcerán recompensó las doncellas y las familias que las habían librado; también hizo donaciones en la iglesia de San Esteve de Bagà. Próximo a la muerte, se retiró como monje al monasterio de Santas Creus donde murió y fue enterrado.

2 - Pedro Luis Garcerán de Borja

Pedro Luis Garcerán de Borja, marqués de Navarrés, Virrey y Capitán General de los Reinos de Tremecén, Ténez, Orán y Mazarquivir.

Biznieto del papa Borja Alejandro VII. Decimocuarto y último Gran Maestre de la Orden de Montesa (Segorbe, 1528 – Barcelona, 20 de marzo de 1592), noble español. Garcerán era hijo del tercer Duque de Gandía y su segunda esposa, Francisca Garcerán de Castro-Pinós, hija del vizconde de Evol, de forma que fue hermanastro de san Francisco de Borja.

Cuando en 1544 murió el Gran Maestre de la Orden de Montesa, Francisco Llanzol de Romaní, se inició el complicado proceso de su sucesión que terminó resolviéndose a favor del joven Pedro Luis, dispensado por el Papa de la minoría de edad que le impedía ocupar ese importante puesto. Ello le granjeó numerosos enemigos que tuvieron un papel relevante en el futuro. Fue nombrado el 26 de diciembre de 1556 virrey y capitán general de los reinos de Tremecén, Túnez, Orán y Mazalquivir, y en 1557 el rey le hizo Marqués de Navarrés (Valencia).

No menos importancia tuvo el que, en 1558, contrajera matrimonio con Leonor Manuel, una dama portuguesa de alta alcurnia, para lo que fue necesaria una nueva dispensa papal, dado que por su condición de religioso no podía hacerlo. Para entonces, sus relaciones con Felipe II no eran cordiales. De hecho, a raíz de los enfrentamientos de los Borja con otras familias, el monarca había mandado ejecutar en secreto a Diego de Borja, hermano de Pedro Luis y otro hermano, Felipe Manuel, también condenado a muerte, logró huir y que la pena le fuera conmutada por la de destierro.

Pedro Luis Garcerán de Borja
Orden de Montesa
Orden de Montesa
Castillo de Montesa en Valencia
Castillo de Montesa en Valencia

Pero, a finales de 1571, abandonó la plaza para realizar un viaje a la península y, poco después, era detenido por la Inquisición y encerrado en sus cárceles. Se enfrentaba nada menos que a una acusación de sodomía, un pecado que era objeto de gravísimas condenas. El hecho de tratarse de un personaje tan importante que, además, era Gran Maestre de la Orden de Montesa, provocó la lógica perplejidad y, aunque por su condición de eclesiástico, intentó sustraerse del rigor del tribunal, no pudo lograrlo y el proceso se prolongó durante dos años, contando con la aquiescencia de Felipe II que vio en ello la posibilidad de alcanzar uno de los objetivos que perseguía: la incorporación de la Orden a la Corona, como ya lo estaban las tres órdenes militares castellanas.

Se valieron para ello de la denuncia de un joven llamado Martín de Castro, al que calificaban de “prostituto” al que habían sorprendido en la cama de otro caballero distinguido, D. Juan de Gurrea y Ribagorza, descendiente de Fernando el Católico, que terminó siendo ejecutado. Al joven lo mantuvieron con vida porque había contado su relación con el Maestre. Pero no fue el único acusador ya que otros caballeros de la Orden, lógicamente enemigos, se despacharon a gusto narrando las andanzas sexuales de Pedro Luis y, en concreto, con su criado Gaspar Granulles, al que afirmaban lo habían visto siendo “cabalgado” por el Maestre.

En 1583, Garcerán de Borja, tras unas disputas internas por la sucesión del Gran Maestre en la Orden de Montesa, relacionadas en particular con su octavo hijo don Juan Garcerán de Borja, que era Comendador mayor ya a sus 23 años y a quien había prometido el Maestrazgo, con gran oposición interna en la Orden cuando declaró esta intención en el capítulo de 1583, resolvió negociar la entrega del maestrazgo al rey Felipe II, el cual obtuvo de Sixto V el permiso necesario para recibirla en una bula del 15 de marzo de 1587. Así quedó incorporada a la corona la última Orden que se mantenía independiente. A cambio obtuvo Galcerán como recompensa la Encomienda Mayor de Calatrava y en 1591 el Virreinato de Cataluña, falleciendo en Barcelona el 20 de marzo de 1592.

Comentarios de Catherina (CCC).

A destacar: